¿Son las cerraduras invisibles la solución definitiva?
Indudablemente NO
UN SISTEMA de seguridad NO EXENTO DE inconvenientes
Empecemos por las ventajas
Este sistema con mando a distancia, funciona como un cerrojo, que no puede ser atacado o mejor dicho ganzuado al ser invisible desde el exterior y por supuesto carecer de bombillo al uso. Es decir, aunque se forzara el bombín de la cerradura principal, esta seguiría siendo un obstáculo, Solo son inaccesibles a ataques de habilidad o de manipulación.
Hasta ahí las virtudes. Porque pese a estas no evitará que puedan entrar en su vivienda si se utiliza un ataque de fuerza para ello, claro está, como un empujón fuerte o un apalancamiento).
Es un sistema poco fiable e inseguro, por su escasa resistencia frente al apalancamiento, que aportará tranquilidad relativa. O mejor dicho seguridad emocional a nuestro hogar, pero de ninguna manera compraremos seguridad real (excepto en el caso de manipulación con ataques de habilidad).
Cuando hablamos de cerraduras invisibles nos referimos a cualquier marca del mercado, como pueden ser Remock Lockey, Wafu, Selockey, Lince Supra...al fin y al cabo todas ellas trabajan de un modo muy parecido.
Son indicadas a la hora de reforzar puertas blindadas o acorazadas, en vez de cambiar cerradura o el bombín.
Por tanto podemos decir que las cerraduras invisibles electrónicas SOLO proporcionan seguridad emocional, pero de ninguna manera seguridad real, a excepción, de la seguridad frente al bumping o el ganzuado.
Continuemos con los inconvenientes:
NOS LAs VENDEN COMO LA PANACEA, PERO REALMENTE NO LO son
El mismo hecho de su ‘invisibilidad’ hace que no inhiba el ataque del ladrón a nuestra puerta, porque desconoce su existencia.
No es tan complicado que los ladrones entren en tu hogar, ya que en el caso de ataques violentos (un simple empujón o un apalancamiento) terminarían abriendo nuestra puerta.
Desgraciadamente se han dado bastantes casos en los que, tras manipular el sistema principal de cierre, al forzar la puerta, saltó el cerradero de la cerradura invisible, consiguiendo entrar a la vivienda con suma facilidad debido a la poca resistencia frente a ataques moderadamente violentos. Nos lo hemos encontrado en ocasiones.
Es demasiado fácil la instalación en cualquier tipo de puerta o ventana, lo cual nos lleva a reducir drásticamente la resistencia frente a ataques no excesivamente violentos:
- Tornillosincluidos para montaje en puertas o ventanas de madera o metal (los cuales dejan muchísmo que desear, son tan básicos que cuando realizamos la instalación de una cerradura invisible los sustituimos por otros de mayor calibre, lo que hace aumentar en cierta medida su resistencia, pero nada del otro mundo).
- Provista de adhesivo extrafuertepara montaje en puertas o ventanas de cristal (yo jamás dejaría la seguridad de mi hogar o negocio en manos de un adhesivo por muy fuerte que sea o que me lo quieran hacer creer).
Es de uso exclusivo para interiores, tiene un sistema de desbloqueo interior para casos de emergencia. Lo malo es que este dispositivo únicamente se puede accionar si estamos dentro de la vivienda.
Dicho esto la conclusión es obvia Cooperativa Cerrajera no recomienda de ninguna de las maneras las cerraduras invisibles.
